viernes, 20 de febrero de 2009

Yo tenía un sueño...

Hace muchos años ya... Mi vida cambió... Alguien me dijo que todo lo que deseara con el corazón lo iba a conseguir. Yo era solo un niño, vivía en el campo, en mi país Colombia, y estaba lejos de las oportunidades, de la gente adinerada, de la gente influyente, lejos aparentemente de todo... Cuando escuché que todo lo que deseara se podría conseguir, decidí creer, porque creer era mí única salida.... Creer era mi única esperanza, mi única salvación... Yo creí en angelitos que me guiaran a llegar al lugar donde habitaban mis sueños y ellos me abrieron el camino.... Simplemente creí, y con mis ojos nublados por las lágrimas al decir adiós... Decidí tomar el camino, para encontrar lo que soñé, decidí luchar para que no fuera una simple ilusión...

He dicho adiós muchas veces, y he dado muchos pasos para encontrar aquellas cosas que en mi corazón han tomado forma, aquellas cosas que en mi ser han sido importantes... Aprendí a verle la magia a la vida, aprendí a creer en hadas.... Aprendí que el futuro sonríe también para las personas comunes y corrientes, como siempre he sido....

Solo he creído... Y cada vez que me ha entrado la duda, me he repetido mil veces... Yo llegaré... Como sea, llegaré....

Hace muchos años llegó a mis manos un libro, que tenía un sello editorial, y me quedé mirando ese sello muchas veces... DIANA... y le dije a Dios: Algún día me gustaría escribir un libro y que ese libro llevara este sello editorial porque ese libro me decía nuevamente que si creía, lo lograría... Como muchos otros libros que Diana ha publicado y que ayudan a millones de personas. De eso han pasado casi veinticinco años.... En ese momento estaba muy lejos, demasiado lejos.... En ese momento tenía mis bolsillos vacios, pero mi corazón lleno de la fuerza que dan los sueños y de la certeza absoluta de que a Dios le importan mis sueños, y que aunque hubiera nacido en cuna de tercera, yo le importaba. Que aunque no tuviera influencias, le seguian importando mis sueños, que aunque no tuviera un centavo y la editorial con la que queria publicar mi libro estuviera a miles de kilometros de mi pueblo le seguian importando mis sueños...

Hoy quiero celebrar la vida, y quiero dar gracias a mis angelitos, a los que me han cuidado de caer, a mis angelitos de carne y hueso, a mis amigos de Colombia, a los que me han sostenido, a los que me han dicho que puedo, a los que en este momento están pensando en que soy capaz y se alegran con mis triunfos.

Hoy creo en los millones de angelitos que viven en este Mexico lindo y querido, angelitos que me han ayudado a transformar cada día de este tiempo que llevo aquí, en días maravillosos... Hoy creo mas que nunca en las señales divinas, que me dicen nuevamente que a Dios si le importan mis sueños, como le importan los sueños de cada una una de las personas que habitan este planeta... Solo que muchos no lo saben, o simplemente lo saben y se niegan a aceptarlo...

Por eso, cuando mis sueños de convertirme en escritor se fueron haciendo realidad, acepté un reto que al comienzo me costó muchísimo y fue enseñarle a mucha gente de los barrios populares de mi país, como escribir la historia de su vida, de la misma manera en que yo estaba escribiendo la mia...

Para ello tomé el dinero que ganaba en televisión y publiqué tres libros que fueron llegando a miles de personas... Pero aún tenía un sueño por lograr, y era que ese sello editorial que vi años atrás, estuviera en uno de mis libros... Les puedo jurar que solo lo desee, jamás lo busqué... Por eso no pude contener la emoción cuando mi amigo Daniel Mesino, me dijo que mi libro no saldría con el sello de Planeta como inicialmente pensaba, sino que saldría con el sello de editorial Diana.... El sueño se había hecho realidad...

El sueño esta aquí, y curiosamente se llama Equipaje para un sueño... Yo lo soñé, siempre lo soñé... yo he esperado, yo he confiado... yo he creido, y hoy, mi equipaje sigue estando cargado de fe, de persistencia, de luz... de esperanza.... Sigo creyendo en angelitos, en angelitos colombianos, en angelitos mexicanos, en angelitos puerto riqueños, americanos... Sigo creyendo en mis sueños... y hoy siembro un nuevo sueño... y es llegar a millones de corazones con un objetivo claro: enseñarles como hacer su equipaje para un sueño... Ya no soy un niño, pero mi corazón de adulto no puede menos que agradecerle a ese niño que fuí el valor que tuvo para creer en muchos de los sueños que hoy puedo mirar hacía atrás y ver realizados.... Hoy soy un adulto que al soñar se vuelve niño, y sueña con aportar un granito de arena a las personas con que me encuentre en la vida al decirles que si de verdad queremos hacerlo, lo haremos... y que el equipaje todos lo traemos con nosotros, solo hay que reconocerlo...

Quiero por último recordar a un amigo que muchas veces me dijo que creyera en mi y que siguiera adelante, a Sergio Segura quien me ofreció escribir estas palabras. Sé que donde este mi amigo Sergio, estará brillando y que donde esté sabe cuanto le quise y cuan agradecido estoy. Por último, pero no por ello menos importante: Quiero darle gracias a Dios, al Dios de mis sueños... A Jesús cuyas enseñanzas me han cambiado la vida, al Jesus alejado de los fanatismos que me ha puesto en los lugares donde he ido en este recorrido, al Jesús que me habla de amor, de sueños, de aceptación, de perdón, de persistencia, de fe, de esperanza... y por supuesto a mi Virgen de Guadalupe, confidente de tantos momentos de búsqueda, de tantos pasos avanzados... Mi Virgen Morena a quien de rodillas le pedí que yo fuera capaz de hacer cosas buenas en este país al que quiero tanto... A ellos les encomiendo mi nueva realidad... La realidad de un hombre que quiere recorrer el mundo con sus sueños, con su sonrisa, con su esperanza, con su equipaje de sueños para compartirlos con todo aquél que se cruce en su camino... Porque los sueños, son la salvación de la gente común y corriente, de la gente que aparentemente no tienen nada, porque nadie les ha dicho aún que lo tienen todo... Yo quiero ser de los que le diga a millones de personas que si creen, lo lograrán... como alguien alguna vez me lo dijo a mi, porque sé que una vez lo sepan... Nada los detendrá... A todos.... Gracias por estar aquí.... Gracias por ser mis amigos... Gracias por ser mis angelitos...

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